pactos interprovinciales
Con la renuncia del Director Supremo, José Rondeau, producida en 1820 -tras ser vencido por las tropas federales conducidas por Estanislao López y Francisco RamÃrez en la batalla de Cepeda- se produjo en Buenos Aires una crisis institucional sin precedentes: la desaparición del gobierno central de las Provincias Unidas del RÃo de Frente al derrumbe del poder central emergió un nuevo desafÃo en el escenario polÃtico rioplatense: la construcción de una estructura jurÃdica-polÃtica que preservara las autonomÃas de las provincias sin resignar la unidad nacional dentro del espacio territorial heredado de la estructura virreinal. Las provincias eran las únicas estructuras polÃticas existentes, por lo que intentan organizar la convivencia armónica entre ellas, conciliándola con sus autonomÃas, mediante los pactos interprovinciales. Los pactos interprovinciales eran esencialmente tratados de paz firmados entre provincias, que sentaron las bases de la organización futura del paÃs. El primero de ellos, fue el Tratado del Pilar, firmado en El más importante de todos fue el Pacto Federal, del 4 de enero de 1831, firmado inicialmente por cuatro provincias, al que luego, adhirieron todas las provincias argentinas, sirviendo de armazón jurÃdica a |
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