desde 1800 hasta 1851
la revolución de mayo
 
 
Entre las muchas consecuencias derivadas de los triunfos sucesivos obtenidos sobre los ingleses, hay una que interesa dejar aquí sentada, por la influencia que ha de ejercer respecto a los sucesos que se avecinan en el Río de la Plata. Se trata de cierta confianza en sí misma que invadió a Buenos Aires, extendiéndose por el resto del país paulatinamente.

También pudo influir en los acontecimientos inminentes la actuación de Sobremonte










Santiago de Liniers, héroe de la reconquista



–que los porteños desaprobaron– y su reemplazo por Liniers, que obedeció a una decisión autónoma de la población y de las autoridades aquí asentadas.

En cualquier caso, no fueron sólo los hechos acaecidos en esta orilla del océano los que condicionarían el futuro próximo. Muy por el contrario, la situación que atravesaba España ejerció también un influjo poderoso, resultando ineludible referirse a ella para comprender las cosas.

Cabe recordar finalmente que, desde el 4 de julio de 1776, las colonias inglesas de América del Norte se habían emancipado de su metrópoli, iniciando una marcha que el resto del continente no dejó de observar con atención.